La mayoría de los padres a entender el concepto de educación sobre salud sexual, pero muchos no tienen en cuenta las instrucciones de aula sobre salud sexual suficiente para las necesidades de sus hijos. Aunque la información de base es compartida durante la clase, el adolescente no puede oír o entender todo lo que él o ella necesita saber. educación sobre salud sexual es responsabilidad de los padres, torpe que sea. Sin embargo, la sociedad, en general, se basa en el sistema escolar formal para proporcionar a los niños con los antecedentes necesarios biológicos y sociales sobre la sexualidad. Pero al dar la información de seguimiento y reforzar lo que el adolescente aprende en la escuela, los padres pueden ayudar a sus hijos en la toma de decisiones acertadas cuando se trata de sexo.
No es fácil para los padres hablar con sus hijos sobre el delicado tema del sexo. Perennemente esperando el momento adecuado proverbial puede hacer que los padres pierden la oportunidad de enseñar a sus hijos sobre la necesidad de información, la responsabilidad y circunspecto cuando se trata de comportamiento sexual. En lugar de prepararse para este tipo de hablar, pensar de educación sobre salud sexual como otra conversación en curso. Por ejemplo, aprovechar el momento cuando un programa de televisión plantea cuestiones sobre el comportamiento sexual responsable, y usar esto para iniciar la discusión. Si en el caso de un buen tema surge en un momento no muy conveniente, simplemente decir que hablar de esto más adelante sería una buena idea, y decir que por hablar de ello en una época muy posterior.
Mantener la educación de salud sexual de bajo perfil puede ser una buena idea. No trate de presionar al niño a hablar sobre el sexo. Basta con traer a colación el tema siempre que esté a solas con su niño o adolescente. momentos cotidianos, como ir en coche, ir de compras, o durante bocadillos tarde por la noche puede ser la mejor oportunidad para hablar sobre el sexo. Además, ser honesto con sus hijos es importante. Admitir a los que, como ellos, no se siente cómodo hablando de sexo, pero insisten en que es un tema que debe discutir abiertamente, sin juicio previo o temores. Si alguna vez el niño hace una pregunta que cualquiera de los padres no tienen una respuesta, que ofrece para realizar investigaciones sobre las respuestas o buscándolos juntos debe ser una buena alternativa.
Cuando se habla de educación sobre salud sexual a los niños, siendo de particular también es necesario para una comunicación clara. La indicación de los sentimientos y opiniones sobre cuestiones específicas del sexo como el sexo oral y las relaciones sexuales, y la presentación de los riesgos de manera objetiva, incluyendo el dolor emocional, enfermedades de transmisión sexual y el embarazo no planificado puede abrir sus ojos a los posibles riesgos cuando se trata de las relaciones sexuales prematrimoniales. Además, conferencias o la concesión a cabo tácticas de miedo, no servirá de nada. Nunca los docentes o se basan en tácticas de miedo sólo para disuadirlos de realizar cualquier actividad sexual. En su lugar, escuchando con atención lo que tienen que decir puede ayudar a entender las presiones cotidianas del niño, los desafíos y preocupaciones con respecto a la salud sexual.
En la conversación que tiene derecho a la salud relacionados con la educación sexual con una adolescente, es esencial ir más allá de los hechos. El niño necesita saber la información correcta, pero todavía tiene que abrirse a sus sentimientos, sus valores y actitudes. Trate de examinar las cuestiones éticas con responsabilidad en el contexto de las propias creencias personales o religiosas de la familia. Y al invitar a sus hijos a tener más conversaciones con usted sobre el sexo y otros temas que son importantes para ellos, también hará que sus relaciones con ellos más sanos, informativo y divertido.
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